La tantas veces anunciada Ley de Emprendedores está lista para su aprobación, esta semana o la próxima, por el Consejo de Ministros,
aunque el proyecto final podría introducir todavía modificaciones respecto a lo anunciado, en forma de una generalización, a la totalidad del colectivo de los emprendedores, de los beneficios recogidos en la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven.

En concreto, en medios próximos al Ejecutivo han confirmado que los ministerios implicados, especialmente el de Empleo y Seguridad
Social, están estudiando ampliar a la totalidad de los nuevos autónomos, de cualquier edad,la tarifa plana de 50 euros en la cotización a la Seguridad Social; la compatibilización de la prestación por desempleo con el inicio de una actividad por cuenta propia; y la posibilidad de capitalizar el 100 por cien de la prestación por desempleo para iniciar un negocio.
Son medidas a las que hoy sólo pueden acceder los menores de 30 años y que, de ampliarse a todas las edades, ayudarían a resolver uno de los mayores problemas que hoy tienen los nuevos autónomos, como es el de los gastos iniciales, agravado por la carestía del crédito.

En el capítulo de la fiscalidad, la Ley de Emprendedores dará vía librealesperado IVA de caja.Un cambio en el pago del tributo que, con
carácter voluntario, permitirá pagarlo sólo cuando se cobren efectivamente las facturas. La medida se aplicará a pymes y autónomos no sujetos al régimen de módulos, con un volumen de negocio inferior a dos millones de euros y Hacienda estima que beneficiará a casi 1,3millones de autónomos y más de un millón de pymes.

Además, la nueva normativa incluirá la anunciada deducción de hasta el 10 por ciento enla cuotaíntegra del Impuesto sobre Sociedades para los beneficios que se reinsertan en la actividad empresarial enlas empresas con un volumen de negocio inferior a los 10 millones de euros.
Asimismo,los trabajadores autónomos podrá aplicarse en la declaración del IRPFlas deducciones fiscales por I+D+i que actualmente se aplican las empresas en el Impuesto sobre Sociedades.
Por lo que respeta a la financiación, el proyecto del Gobierno permitirá deducir en el IRPF y en el Impuesto sobre Sociedades las aportaciones a capital semilla durante todo el tiempo que dure dicha aportación. Estas aportaciones tendrán también una deducción sobre las plusvalías generadas cuando se recupere la inversión.

La nueva Ley permitirá también impulsar la llamada segunda oportunidad para los emprendedores que fracasen, permitiendo la eliminación total de las cargas después de pasar por el concurso de acreedores.
Además, permitirá fijar un mínimo inembargable por los acreedores, que podría incluir el domicilio familiar,los instrumentos de trabajo y una cantidad equivalente al salario mínimo. Este mínimo inembargable, que deberá declararse en el Registro, será también de carácter voluntario, dado que podría suponer una merma en la posibilidad de recibir financiación al reducirse las garantías aportadas.

Potenciar la resolución extrajudicial del cierre del negocio, agilizar los trámites burocráticos para conseguir la creación de empresas en un máximo de 24 horas y reducir a 40 euros los costes administrativos para crear un negocio nuevo, son otras delas medidas que incluye la Ley de Emprendedores.