El 93% de los economistas de A Coruña consideran que la medida sugerida desde la UE de subir los tipos reducidos del IVA no es buena idea. Este dato se desprende de los resultados del \»Barómetro de Economía\» correspondiente a los tres primeros meses de este año, una encuesta trimestral realizada a miembros del Colegio de Economistas de A Coruña que se elabora por iniciativa de esta entidad y con el patrocinio de la Diputación coruñesa.
Los resultados del primer trimestre de 2013 han sido presentados en el día de ayer por el vicedecano de la entidad colegial, Venancio Salcines, y por la directora del estudio, María Jesús Freire Seoane, profesora titular del departamento de Análisis Económico en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de A Coruña.
Los responsables del informe solicitaron a los profesionales entrevistados que valorasen la situación económica coruñesa, gallega y española. Aunque se ha percibido una caída con respecto al barómetro anterior, la economía provincial es la mejor valorada, por encima de la regional y nacional, con una calificación de 4,1, seguida de Galicia con un 3,9 y, por último, la española, con un 3,6. Los datos obtenidos muestran que la mayoría de los economistas coruñeses (85,57%) considera que la situación de Galicia ha empeorado con respecto al año pasado.
La percepción del contexto actual según el sector de ocupación de los profesionales entrevistados manifiesta que los que perciben como peor la situación actual de la economía gallega son los trabajadores de Consultoría/Asesoría, y de Banca/Seguros con el 91,04% y 90,91%. Los empresarios y/o cuenta propia son los que perciben mayoritariamente que la situación está peor, un 0,53 sobre 10, por encima de los parados (0,97). Por su parte, los asalariados de los sectores privado y público registran una mejora en sus expectativas.
En el apartado de problemas actuales en la provincia de A Coruña, el paro sigue en cabeza como caso de mayor preocupación para los economistas (78,30%), seguido de la debilidad en la demanda interna/externa (68,70%) y la inadecuada dimensión de la estructura de las empresas gallegas (59,30%). El déficit de infraestructuras y comunicaciones, el precio de los combustibles y costes laborales, son también percibidos como problemas importantes, pero ya a una mayor distancia, con 24,30%, 23% y 21,70%, respectivamente.
Entre las acciones más necesarias para el fomento del empleo, la gran parte de los encuestados reclama la exigencia de captar inversión extranjera (puntuando esta medida con un 7,99 sobre 10). También abogan por mejorar el sistema educativo (8,23 sobre 10) y crear nuevos nichos de empleo (con una calificación de 7,81 sobre 10). La reactivación de los sectores agrario y construcción, puntuado con un 6,59 y 4,67 respectivamente sobre el total, se adelanta al incremento del empleo público, que no se aprecia como medida estrictamente necesaria (un 3,87 sobre 10).
El 77% no augura crecimiento este año
El último bloque del estudio recoge la opinión de los encuestados con respeto a temas relacionados con la actualidad. En esta ocasión se centró la atención en la confianza de crecimiento a partir del cuarto trimestre de este año, la facilidad para acceder a crédito y la recomendación de la UE de subir impuestos indirectos.
El 77,40 % de los encuestados declara percibir como ‘nada probable\’ y ‘poco probable\’ que se genere crecimiento en ese período, mientras que entre las opiniones optimistas, un 11,78% afirma que es ‘algo probable\’, el 9,76% que es ‘probable\’ y el 1,01% \»muy probable\». Con respecto al grado de mejora en la banca para facilitar crédito a las empresas, el 90.94 % declaran que la banca no ha mejorado ‘nada\’ (un 57,38%) o ‘poco\’ este aspecto, un 33,56%.
El estudio se ha hecho eco de las opiniones de los economistas segregando por la situación laboral del entrevistado. En este sentido destaca que las opiniones más pesimistas con respecto a la concesión del crédito se dan en los empresarios y/o cuenta propia y en los parados, con un 93,75% y un 91,43% de respuestas ‘nada\’ y ‘poco\’.
Por último, el 93% declara considerar la subida de los tipos reducidos del IVA como ‘nada\’ o ‘poco beneficiosa\’. Del porcentaje restante, el 3,67% opina que es ‘algo\’ beneficiosa, el 2,33% que es ‘bastante\’ y tan solo el 1% dice que es ‘mucho\’. Según la situación laboral del entrevistado, son los asalariados del sector público y los empresarios y/o cuanta propia los que se muestran más críticos con la medida, seguido del sector privado y parados.