Tres meses después de que el grupo de expertos culminase el informe sobre la reforma de las pensiones, el Ejecutivo ha convocado a sindicatos y patronal para presentar el borrador de la reforma. Estas son las principales claves:

Un nuevo modo de actualizar las pensiones:

El Ejecutivo prevé que el 1 de enero entrará en vigor la nueva fórmula para actualizar las pensiones, que finalmente se desligarán del IPC por el impacto que tienen en las cuentas públicas. Báñez subrayó que el 27% del gasto total en pensiones procede de la actualización con los precios de consumo, por lo que considera necesario introducir nuevas fórmulas, como los ingresos y los gastos del sistema, “para hacerlo sostenible y autofinanciable”. Báñez previó que el IPC se situará en noviembre, mes de referencia para actualizar las pensiones, en el 1%, por lo que volverán a a subir para el 70% de los pensionistas.

Cómo se garantiza la sostenibilidad

La titular de Empleo justificó el retraso del factor de sostenibilidad hasta 2019 porque considera que la viabilidad financiera está garantizada. “La propuesta es que entré en vigor cuando supuestamente tocaría su primera revisión”, apuntó. El objetivo de este factor será que todos los contribuyentes cobren lo mismo si han cotizado lo mismo. La corrección se producirá al introducir la variable de la esperanza de vida, que solo se aplicará a los nuevos jubilados a partir de 2019. Dicho de otra manera, que los futuros jubilados ganarán menos que los que ya cobran en la medida que vivirán más años.

Rechazo sindical a los cambios

Pese a que la propuesta presentada por Empleo es mucho más liviana que la presentada por los expertos a principios del verano, los representantes de CC OO y UGT mostraron su rechazo y pronosticaron una negociación dura. “No se puede aprovechar un déficit coyuntural para tomar medidas estructurales”, señaló Carlos Bravo, secretario confederal de Protección Social y Políticas Públicas de CC OO. Por su parte, la directora del departamento sociolaboral de Cepyme, Teresa Díaz de Terán, reclamó al Ejecutivo máximo consenso, “lo que le dará un valor añadido en estos tiempos de crisis”.

Apenas cuatro meses para negociar

La reforma de las pensiones es uno de los ejes sobre el que ha basculado la negociación entre Bruselas y Madrid para suavizar el objetivo de déficit para España. Esa es una de las razones que ha propiciado la celeridad en su tramitación. El objetivo es que el anteproyecto de ley se apruebe en Consejo de Ministros a finales de septiembre y que de allí pase a negociarse directamente en el seno del Pacto de Toledo, donde están representados grupos parlamentarios y agentes sociales. El acuerdo parece difícil, especialmente con el PSOE, la principal formación de la oposición, que se opone a esta reforma.

 

Para cualquier consulta sobre materia fiscal, contable o jurídico no dude en ponerse en contacto con nosotros a través de cualquiera de los medios indicados.

 

fuente: Cinco Días